Exclamación humanista
Sabiendo ya todos la diferencia de la humildad a la cobardía… así me presento a ustedes con ese sentimiento. Me presento ante ustedes como igual, sin darle más importancia al mensajero que al mensaje, para exclamar como hombre libre al amparo de las leyes divinas sin las cadenas de la vanidad, poder y avaricia que nos mantienen dormidos.
¡Heme aquí, he despertado a tu llamado y mostrar así que somos uno, humanidad!
Para embarcarme en el ciclón del destino para ya no abandonarme a la suerte, tomar el timón del libre albedrío en mis manos y así dirigirme a mi reino divino en el cual me esperan con ansias y yo lo anhelo con pasión.
Soy Dios humanidad
Cuerpo, espíritu y alma me integran como tu materia,
gravedad y espacio lo componen todo.
Evolución, el linaje que formamos.
Más completo por ser divino.
Solo debes despertar
entendiendo por divino
solo el bien generar.
He escuchado tu clamor
por el derecho a la paz
respetando tu albedrío
hoy te vengo a despertar.
La ley de 3 es ley divina
te lo voy a demostrar
conjugando 3 factores
y su forma de funcionar.
Matemáticas y ciencias,
filosofía y religión,
civilización humanista
será su concepción.
Levántate y camina
a mi encuentro nada más
ese paso de fe necesitas
para poder alcanzar tu derecho divino,
tu inmortalidad.
Situación social
La expansión capitalista que proviene del individuo y el poder socialista originado a partir de la colectividad llegan a su última frontera que es el mundo sin entender o encontrar una forma de convivir, lo que conlleva a que ambas cometan un grave y egoísta error de pensamiento.
Un pensamiento egoísta generará inevitablemente que se integren individuo, colectividad y Estado por la presión que genera el poder en mayoría a favor de una de esas partes.
Derecho a la paz
Es la máxima exclamación del hombre, pero la verdadera libertad consiste en la felicidad de cada una de las partes que la integran: cuerpo, alma y espíritu.
La tecnología más avanzada es la que puede confundirse con la magia.
Solo si las grandes fuerzas que se enfrentan despiertan, ocuparán su lugar de iguales y se verán como son: hombre y mujer se perdonarán, remediarán su daño consciente.
Hombre y mujer colectivos, integran un mismo interés, su existencia.
Despertar
Despertar es la evolución pacífica del hombre.
Despertar es la capacidad del hombre para eliminar la opresión.
Despertar es la máxima muestra de desarrollo de una generación.
Despertar integra pasado, presente, futuro: nuestra historia.
Despertar es lo científico y lo histórico, propósito de nuestra existencia misma.
Despertar es la plenitud misma de la satisfacción del hombre.
Despertar es la libertad de todo lo que integra al hombre como tal, rompiendo solamente sus últimas cadenas: vanidad, avaricia y codicia.
Solo así el hombre será completo, libre y feliz;
alma, cuerpo y espíritu despiertos
atendiendo ese llamado interno,
lo que nos hace sentir insatisfechos.
Solo la voluntad se necesita
para emprender un camino juntos
que a través de él y solo sin perder la fe en lo bueno y propósito de nuestras acciones
encontraremos nuestro propósito, llegaremos a la plenitud de lo deseado, nuestra felicidad verdadera.
Por nuestro propio albedrío alcanzar la libertad.
Nuestro propósito: entender que es un universo tridimensional, lo integran 3 factores, aplicando la ley de tres se comprenderá mejor la importancia de nuestra integración a la existencia.
He aquí mi propósito: señalar la existencia de una nueva forma de organización sociopolítica alcanzando el equilibrio del mundo o su ruina. La única solución es que sea capaz de percibir ya que está en su capacidad actualmente de destruir ese evento cíclico que nos retiene hacia un verdadero desarrollo.
Para un derecho a la paz
Me presento por mi situación social, geográfica y política de individuo independiente en todos los aspectos, a razón de situación actual y rumbo de nuestra historia.
Soy un humano y analizo que la naturaleza de todo conflicto se basa en una razón egoísta. Si esta generación es la elegida para hacer la diferencia, escuchará ese llamado interno y despertará.
Solo la voluntad del hombre hace falta para el ser humano. Humildemente les digo: hay una forma matemáticamente posible de alcanzar la humanidad, pero solo con todos la alcanzaremos.
En especial, el poder empresarial en aras de aparecer, ahora que la última disputa es el mundo.
Que quede escrito para las generaciones que nos juzguen, que antes de que nos destruyéramos, hubo una forma pacífica basada en el deber y el derecho, pero nuestro egoísmo nos ató a la voluntad de la mayoría, violentando el libre albedrio de la minoría u oposición a esta forma de pensar generalizada.
Se puede trascender, existen nuevos campos para competir pacíficamente, evolucionar individualmente, desarrollarse colectivamente, seremos civilización, descubriremos nuevos elementos, obtendremos la capacidad de interferir con ellos, una completa comprensión de nuestra existencia y la importancia de que formamos parte en todos los planes, desde el átomo al universo, del nacimiento a la inmortalidad, de la creación a la existencia misma.
Humildemente, con respeto y amor, mis hermanos, expreso mi pensar y mi opinión.
Si aceptamos que Dios es la creación misma, somos sus hijos, el bien es nuestro origen, hay una línea moral establecida para seguir con el libre albedrío como laboratorio para desarrollar experimentos morales necesarios para nuestra evolución como civilización, el equilibrio entre el derecho y el deber para obtener la paz.
Si una partícula integra la célula y una cadena sucedida de integraciones muestran un patrón evolutivo hacia una dirección, un átomo que conforma una integración determinada según la dirección en que se va a integrar el universo, toda sociedad siente la necesidad de integrarnos para encontrar un propósito y marcar una dirección.
Si tridimensionamos los factores, encontramos que la dirección que sea, hay un punto de inicio, un origen en común.
Encontrando esto, podemos relacionarlos de formas iguales que nos permitan ampliar nuestra perspectiva, desarrollándonos mientras interrelacionamos e interactuamos para que de manera colectiva, individual y estratégica converjan en una integración que nos permita desarrollarnos en forma igualitaria en cada campo requerido para integrar en esta realidad el sueño utópico tan anhelado por nuestros antepasados, digno y heredado para nosotros, deber y derecho de ceder a las futuras generaciones, la civilización humana, la realización de un sueño desde nuestra concepción, propósito de nuestra existencia.